Dos modelistas entusiastas construyen el legendario autobús de línea de Wiblinger de Kässbohrer a escala 1:8 con piezas de Lego. Para ello se necesita tiempo, paciencia, imaginación y una buena reserva de piezas.

«Paciencia es mi segundo nombre», se ríe Burkhard Siemoneit, de 67 años. El funcionario jubilado de la policía de Wiblingen, actualmente un distrito de Ulm, y el ingeniero Saher Elsheikh construyen juntos una maqueta única en el mundo del famoso «automóvil de Wibling». El vehículo es el primer autobús de línea de Kässbohrer del año 1911, montado sobre un chasis de camión, que circulaba entre Ulm y Wiblingen. La maqueta se construye a escala 1:8 con unas 15.000 piezas de Lego, únicamente con piezas de Lego.

Burkhard Siemoneit y Saher Elsheikh comenzaron el proyecto en el verano de 2023. El impulso para proyecto fue el 100º aniversario de la unión de Wiblingen con Ulm en 2027. Su finalización está prevista para finales de 2024. Hasta entonces, los dos maestros constructores de Lego estiman que necesitaran unas 2.500 horas para la construcción de su autobús de línea Lego. Ambos modelistas cuentan con muchos años de experiencia en la construcción de maquetas de Lego. Las espectaculares maquetas de Lego, como la reproducción del monasterio de Wiblingen (de 2,7 metros a 3,5 metros) y su órgano principal en la basílica, así como un Lamborghini autónomo, ya causaron sensación.

No existían planos de construcción del vehículo original. Por lo tanto, durante las planificaciones, primero nos dirigimos al Centro de Clientes de Setra en Neu-Ulm, donde se encuentra la réplica original de este primer autobús de Kässbohrer. Aquí se sacaron fotos y se midió el vehículo para que al final todo fuera a escala. A partir de las fotografías, los modelistas crearon sus propios planos de construcción. Al hacerlo, han convertido las dimensiones originales al formato de Lego, ya que, al fin y al cabo, las dimensiones del modelo deben adaptarse a las piezas lego, dice Burkhard Siemoneit.

Una vez elaborados los planos, surgió el siguiente reto: encontrar las piezas de Lego apropiadas a la escala correcta, en el tamaño, la cantidad y el color exactos. Un proceso largo, ya que Saher Elsheikh tuvo que buscar y pedir los componentes por todo el mundo. Entre ellas se encuentran piezas m uy especiales que han reunido para esta maqueta. Los fabricantes de maquetas también se benefician de la larga experiencia en esta fase, ya que la clave está en disponer de un almacén bien clasificado. Ahora, el modelo crece constantemente y adquiere forma, mientras que la reserva de piezas de Lego se va reduciendo. Hasta su finalización, se aplica el principio de todos los fabricantes de maquetas: «Siempre tener más piezas de las necesarias».